Skånevik es un precioso poblado de 400 habitantes que se aglutinan en las laderas de una bahía pequeña a la entrada del Åkrefjord, un estrecho, profundo y precioso fiordo que no es otra cosa que una honda entrada del mar en tierra, muy típico de la costa oeste de Noruega.

Más de la mitad de la población la componen unas pocas familias que han vivido por siglos allí. Muchos se fueron a otros lugares antes y después del boom del petróleo, pero también son varios los que retornan a esta pequeña joya de paz y tranquilidad. Y no se trata ya de una comunidad de meros campesinos o pescadores. Tres o cuatro pequeñas industrias florecen en el sitio y una de ellas exporta maquinaria pesada y de alta precisión tecnológica.

La gente se reúne los viernes y sábados en el confortable hotel del poblado para bailar y divertirse un rato. La atracción esta vez era una pequeña orquesta de música tropical (de Stavanger) tocando ritmos del caribe y deleitando a una audiencia compuesta, en gran parte, por gente que aprende a bailar salsa y merengue de la mano del único chileno en el Skånevik, nuestro amigo Julio Núñez quien emprendió la tarea de comunicarles a los lugareños el gusto por su cultura y ha dictado ya dos cursos de salsa con buen éxito y más de cuarenta aplicados alumnos de todas las edades.

Fueron dos días inolvidables para mi amiga Yanina y para mí, porque Julio y su esposa Sigrid nos atendieron como príncipes. Disfrutamos de su cálida hospitalidad, de conversaciones interminables y de una deliciosa caminada (de varias horas) a la montaña hasta el sitio donde la nieve ya nos impidió seguir subiendo.

Lo mejor de todo fue el clima. Si bien la primavera no ha entrado todavía, fuimos bendecidos por tres días de sol rutilante y cálido, cielos azules, y días que empiezan a alargarse perezosamente con crepúsculos que se apagan pasadas las 9 de la noche.

Fotos del paseo y de hermosos parajes de Skånevik

Este artículo fue publicado el Martes, Abril 22nd, 2008 a las 7:54 y esta categorizado bajo Viajes, Cultura, solidaridad. Puedes seguir las respuestas y comentarios a este artículo a través del feed RSS 2.0 . Puedes dejar un comentario, o hacer un trackback desde tu sitio.