De viajes y nostalgias

El viaje de regreso tuvo sus lentitudes y contratiempos que supimos aceptar con algo de estoicismo y un tris de alegría.

Ante la alternativa de tener que esperar 10 horas en el aeropuerto de Oslo para salir en un vuelo nocturno hacia Bergen, surgió la de tomar un tren que normalmente llega en 6 horas. Eso nos animó el espíritu. El goce sinembargo duró poco cuando el tren (bien temprano) se detuvo en medio de la vía y rengueando nos depositó en Bergen, con 4 horas de retraso, a la una de la mañana del dia siguiente y 36 horas después de nuestra salida de Bogotá.

Por fortuna encontramos sol y temperaturas deliciosas, cosa que mañana cambiará dado que se acerca una corriente fría y tormentosa que nos regalará lluvias torrenciales implacables.

Volver a casa tiene sus compensaciones, pero siento que los procesos iniciados en Colombia me retienen. Mañana cuando me ahogue en reuniones y preparación de los detalles del nuevo semestre tendré que dejar un poco esta dulce nostalgia que me embarga.

5 Responses to “De viajes y nostalgias”

  1. Jorge Montoya Says:

    Pues mis mejores deseos en su regreso… aquí estaremos pendientes de esos procesos que ha iniciado. Seguro con la ayuda de esos espacios creados por los muchachos en este tiempo, con sus historias, con sus alegrías y tristezas, logros y retos, podrá usted sentirse un poco allá y acá al mismo tiempo. Gracias por el entusiasmo contagiado Álvaro, seguimos en contacto para que esos procesos crezcan.

    :D

  2. akenaton Says:

    Los viajes largos siempre son tediosos, pero lo son más cuando tenemos nostalgia por lo que dejamos atrás; como que una mitad de nosotros quiciera llegar, y la otra no. pero la vida completa es un viaje. ¿hacia donde? ni idea, pero prefiero pensar que hacia la nada.
    La lejanía aveces es tanta que cree uno que lo separan parseks o gigaparseks, pero en el lenguaje del internet, no hay distancias, y en el del recuerdo menos; eso es lo verdaderamente importante, que en nuestro recuerdo viva la imagen de los momentos buenos que pasaron, ya sea el recuerdo de una tarde de fotografía, o de un chocolate caliente con empanadas en la biblioteca a altas horas de la noche.

  3. Joan Guerrero Says:

    Añoranzas de un viaje, en el que regresar a su tierra natal no tiene precio.
    Bienvenido. Que la experiencia sea compartida entre todos quienes te leemos.

  4. Bel Says:

    Creo que ya lo habìa dicho antes, lo importante y valioso es lo vivido

  5. medea Says:

    Hay algo bonito de regresar a casa, pero siempre pesa lo que queda atrás.

Leave a Reply