Las ciencias no son como los frutos que caen de los árboles

Articulo que publiqué hoy en equinoxio.org

Que en Colombia no hay periodistas científicos. Si que los hay. Están por ahí, subutilizados. Hay embriones de periodistas científicos en las universidades donde sus estudiantes tienen la cátedra respectiva. Los hay, o por lo menos los hubo, en su propia sala de redacción. Lo que pasa es que no disponen ni del tiempo, para salir a hacer la reportería, ni del espacio para publicar. La competencia interna también los apabulla, con el argumento de que “la ciencia no vende” y por eso es la última en las prioridades.
Abramos los ojos. Los reto, parafraseando uno de los párrafos de su nota, a que saquen del anonimato los hallazgos significativos que la opinión pública pasa por alto por falta de divulgación. La responsabilidad es de ustedes, los medios, es de nosotros los periodistas y reporteros. No son los científicos los llamados a tocar las puertas de los diferentes canales de comunicación.
Cordial saludo,
Lisbeth Fog
Periodista dedicada a divulgar los temas de ciencia

Extracté esos dos párrafos de una importante carta que Lizbeth Fog le envió al diario El Tiempo de Colombia, quien en noviembre pasado les pidió públicamente a los científicos que (tal vez abandonando sus labores) mandaran sus hallazgos al periódico para ellos publicarlos. Como si eso no significara toda una labor de por sí, con destrezas muy específicas, y nada sencillas de desarrollar. Una labor de especialistas que requiere, tiempo, talento y dedicación. Allí brillan los mejores, haciendo una labor compleja y dura de mediación.
Afortunadamente la voz de Lisbeth Fog tuvo eco en Maria Clara Mendoza, la Defensora del lector del diario, quien encuentra buenas razones para la indignación de Lizbeth dada la “poca prioridad que le dan a la ciencia nacional como fuente de información” los medios de comunicación colombianos. Ella señala como El Tiempo no tienen ningún periodista que cubra a las entidades colombianas que se ocupan del avance de las ciencias.
El contexto de toda esta carta (y el contenido total de la misma) nos lo “regala” el periodista Víctor Solano, quien bajo el título El científico no está para hacer el trabajo del reportero y desde su blog reflexiona sobre este tema y nos invita a debatir sobre la importancia de la ciencia y la prioridad que debería tener en los medios de comunicación que son al fin y al cabo un importante gestor de “esfera pública” en cada nación.

Está claro que en Colombia se labora durantemente en la ciencia, los saberes y el conocimiento. Hay muchas cosas para destacar y de las cuales podemos aprender. Da verguenza ver la forma como los medios colombianos no solo ignoran sino que “ningunean” (preciosa expresion mexicana) la producción de conocimiento en Colombia. Los meritorios avances en la física, en las matemáticas, y muy recientemente en biología. Entre otras la Universidad de Antioquia tienes grupos destacados en éstos campos que trabajan en llave con investigadores de los Estados Unidos.

Pero no sólo en el campo de las ciencias duras. No todo se hace por medio de laboratorios y probetas. Tambien ignoran otras importantes áreas del conocimiento. Es el caso de las ciencias sociales y las humanas también conocidas como saberes, porque no siempre pueden establecer de forma tan precisa sus premisas y enunciados, como lo hacen la química o la biología. Ellas tienen grandes exponentes, sabios, científicos, y buenos teóricos en Colombia.
Para poner un solo ejemplo y en el campo que mejor conozco de las ciencias sociales y la Comunicación, tiene Colombia uno de los más potentes y fértiles estudiosos en el mundo, el recién nacionalizado maestro: Jesús Martín Barbero. Maestro de maestros, con obras traducidas a varios idiomas y ampliamente citado en el mundo anglosajón.

Pero tendemos a ignorar a estas personas. Los “ninguneamos” nosotros mismos. Muchos lo hacen a propósito. A veces incluso Colciencias. Qué triste.

Hay varias razones del por qué de la situación. Voy a dar solo una. Los resultados científicos no son como los frutos que caen de los árboles, (al estilo de las publicitadas “hazañas” de Paris Hilton). Se trata más bien de “huesos duros de roer”, es decir de una cosa más fuerte y sustanciosa. Y mucho más importante para la cohesión social, la identidad y la autoestima de cualquier nación que se respete.

Jesus MartBarbero.gif

6 Responses to “Las ciencias no son como los frutos que caen de los árboles”

  1. schizoid Says:

    No solo es triste la falta de medios para la ciencia en el país sino lo poco que valen los logros académicos en el país. Durante el 2005 junto con algunos compañeros desarrollamos un proyecto el cual se presentó en una importante conferencia sobre computación flexible, este proyecto llamó la atención tanto así que obtuvo el premio a artículo del año. Muchas de las personas allí quedaban sorprendidas de saber que el proyecto había sido realizado por solo estudiantes de pregrado e incluso ofrecieron grants para que mis compañeros (ya que yo no pude asistir a la conferencia) se fueran a estudiar con esos profesores. Es curioso por que acá el logro, que no pasó de las oficinas de ingeniería de sistemas de la nacional (por que ni siquiera los demás estudiantes se enteraron) no ayuda a la hora de obtener alguna beca para posgrados ni nada más. Es tan solo un logro personal.

  2. Víctor Solano Says:

    Estimado Álvaro. Has logrado una excelente recontextualización de mi reflexión, superándola ampliamente. La ciencia no tiene dolientes en los grandes medios porque las instituciones de la ciencia no pueden darse el lujo de pagar pauta publicitaria para anunciar los resultados de una investigación que se hace con las uñas y que muchas veces sus investigadores trabajan sin recibir sueldo. Esa es una verdad de a puño, triste, irresponsable y descorazonadora.

    No pasa igual con el mundo de la salud que, amparado en las tendencias que persiguen la nueva estética de la ‘mujer habichuela’, obtienen nuevos espacios para el contenido editorial, subsidiado por los intereses de las firmas que venden tratamientos estéticos desechables. Lástima que a veces el periodismo no va en la misma vía de las empresas de medios. Saludos.

  3. THILO Says:

    ¡Feliz día del periodista!

  4. CaRoLiNa Says:

    Hola!!

    Sólo pasando a dejar un saludito a mis colegas en el día del periodista.

    Abrazo grande!!

  5. JAIME HUMBERTO MEDINA Says:

    ¡FELIZ DIA DEL PERIODISTA!

  6. Álvaro Says:

    Schizoid:
    La experiencia que nos cuentas me deja mudo e ilustra la falta de apoyo y de estímulo a la creación. Cómo puede Colombia potenciar sus avances en tecnología, si ignoran las maravillas que están haciendo jóvenes como tú? No me cabe en la cabeza.

    Víctor:
    Yo retomé tu reflexión porque me parece muy importante ampliar la discusión. Gracias por por inspirarme a escribir algo que quiero seguir discutiendo aquí contigo y con otros.
    Y cuando señalas la triste realidad de otras formas muy existosas y socorridas en elos periódicos de “difusión de descubrimientos” en el campo de la estética corporal, dan ganas de llorar.

    Thilo, Carolina y Jaime Humberto:
    Felicitaciones a ustedes tres que representan el surgimiento de nuevas y tal vez mejores formas de ser autores en la esfera pública: blogperiodistas!

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