Por las rutas de Colombia

cruce-de-vias.jpg
No es necesario el avión para viajar de Medellín a Pereira. Existe un servicio directo muy rápido de taxi colectivo llamado Flota Ospina. El trayecto no es largo pero la vía es congestionada y peligrosa hasta el puente de La Pintada, desde donde se cruza el Cauca un veloz rìo de hondo caudal y gran belleza paisajìstica.
restaurante-imposible.jpg
En el Paradero “El cañón de río” nos detuvimos a almorzar. El restaurante caminero era algo lúgubre y con mesas y sillas de plástico. Descubrí que a pocos metros, inacabado y en guadua tenía un comedor con preciosa vista al Cauca. Almorcé mientras disfrutaba de esa pequeña maravilla geográfica que es la desembocadura de uno de sus afluentes.
Afluente-del-rio-Cauca.jpg
Las carreteras están deshechas por la lluvia y por todas partes hay derrumbes y de tanto en tanto trabajadores en la vía. Pasamos cerca al aeropuerto de Santa Águeda donde la novedad es un peaje construido de manera clásica con líneas delgadas, elegantes y cabinas de cristal. No alcancé a fotografiarlo.

Subir desde el cañón del Cauca a Chinchiná en una tarde levemente soleada es una experiencia emocionante para todos los sentidos. La atmósfera parece vibrar con los aromas de las flores y de la yerba que crece ferazmente. Las vacas pastan y a los lados de la vía algunos cafetales engalanan las colinas. No se trata del tradicional cafetal de la deliciosa variedad arábiga, que requiere sombrío, sino de las pequeños y ordenadas filas de arbustos de caturra que producen un cafè industrializado y poco agradable a mi paladar.

En los paradores alrededor de la vía los buses se detienen para que los pasajeros puedan saciar la sed o la fatiga del viaje.

Lo más bello de todo por estas carreteras es la presencia del “mata ratón”, un árbol que no crece muy alto y que sirve para delimitar linderos, adornar los caminos y darle sombrío a los viajeros cuando el sol canicular del trópico más arrecia en las horas de la tarde.

El viento y el sol acarician y hay un ambiente casi festivo en este monótono discurrir por vías mejores y más confortables. Después de sufrir casi tres horas por desfiladeros lleno de curvas peligrosas los viajeros nos acercábamos a nuestro destino, con el regocijo de llegar temprano a casa, en épocas donde las intensas lluvias han arrasado y destruido cientos de casas y además de truncar muchas carreteras intermunicipales.
Viaducto-Pereira.jpg
La entrada a Pereira la anuncia este imponente puente sobre el rìo Otùn, mejor conocido como el Viaducto.

4 Responses to “Por las rutas de Colombia”

  1. catirestrepo Says:

    Don Álvaro: que bellas fotos.

    Buen viaje y gracias por todo lo que nos ha brindado a los ConVerGentes

  2. ARETINO Says:

    Envidia de la buena el poder viajar a tantos lugares hermosos de nuestra patria de un tiron. Pueblos bien conservados, favorecidos por un clima chevre. Muy diferentes de los polvorientos pueblos de la costa y su sol canicular. Pero es nuestro vino y aunque amargo con el brindamos.

    Buen viaje

  3. unknown II Says:

    las fotos hablan por si solas, debe ser un gran encuentro con la naturaleza el hallar tan bellos paisajes en nuestro pais…

    abrazos :)

  4. rosa malave Says:

    SEÑOR ALVARO, ME PARECE MUY INTERESANTE LA INFORMACION Y LAS FOTOS, SOBRE TODO PORQUE PROXIMAMENTE VIAJARE DESDE VENEZUELA POR VIA TERRESTRE, ME ALARMO UN POCO LO DE LAS CARRETERAS Y LAS LLUVIAS, ME PODRIA ACLARAR COMO ES LA UBICACION DE LAS GASOLINERIAS.
    GRACIAS

Leave a Reply